UC - Críticas
| País: Reino Unido. Año: 2014. Duración: 123 min. Género: Biopic.
Dirección: James Marsh. Guion: Anthony McCarten; basado en el libro “Hacia el infinito”, de Jane Hawking. Producción: Tim Bevan, Eric Fellner, Lisa Bruce y Anthony McCarten. Música: Jóhann Jóhannsson. Fotografía: Benoît Delhomme. Montaje: Jinx Godfrey. Diseño de producción: John Paul Kelly. Vestuario: Steven Noble. Distribuidora: Universal Pictures International Spain.
Estreno en España: 16 Enero 2015. Calificación por edades: Apta para todos los públicos. |
Interpretación: Eddie Redmayne (Stephen Hawking), Felicity Jones (Jane Hawking), Charlie Cox, Emily Watson, Simon McBurney, David Thewlis. |
DE AGUJEROS NEGROS Y VIDAS BLANCAS
'La Teoría del Todo' tiene la teoría cinematográfica del éxito bien aprendida, también la de los premios para la que parece claramente concebida, pero en la práctica se queda en un biopic superficial de un personaje que daba juego para mucho más. No era fácil comprimir en un trama de dos horas las tres vertientes de la historia de Stephen Hawking: la científica, la romántica y la de su enfermedad degenerativa. En ese sentido, la película consigue un equilibrio bastante aceptable y funciona, pero pierde interés al decantarse por el aspecto humano y abandonar conscientemente el lado científico que era precisamente lo que podía distinguir esta película de otras parecidas.
SINOPSIS: Es la historia de Stephen Hawking, la mente más brillante y el físico de mayor renombre de la época actual, y de Jane Wilde, la estudiante de Arte de la que se enamoró mientras estudiaban en Cambridge en los años sesenta. Se esperaba muy poco de Stephen Hawking, un inteligente alumno de Cosmología que carecía de voluntad y al que diagnosticaron una enfermedad mortal a los 21 años, por lo que solo le quedaban dos años de vida. Pero el amor que sintió por Jane Wilde, otra alumna de Cambridge, le dio la fuerza suficiente para convertirse en el sucesor de Einstein, casarse con ella y tener tres hijos. Durante el matrimonio, a medida que Stephen se derrumbaba físicamente, su fama académica alcanzaba cimas inesperadas, dando pie a errores que pusieron a prueba su relación y alteraron la vida de ambos.
'La Teoría del Todo' muestra una visión excesivamente idealizada de los hechos, donde el drama se vuelve demasiado luminoso y carece de sombras, igual que sus personajes (pese a las contradicciones de las propias teorías de Hawking), desaprovechando por completo el conflicto teológico que se adivinaba entre el ateo científico y su religiosa mujer. De hecho, el personaje femenino de Jane Hawking acaba tomando un protagonismo casi mayor que el de su marido Stephen, no en vano el guión de la película se basa en la novela que ella escribió titulada 'Hacia el infinito', donde relataba con detalle como había sido su complicada relación lidiando a diario con la enfermedad mientras la familia seguía creciendo... Hay que recordar que fueron padres de 3 niños, aunque como la película es tan delicada y apta deja al margen los secretos de alcoba, como todo lo que pueda resultar hiriente o conflictivo, vamos.
'La Teoría del Todo' se convierte, entonces, en un melodrama romántico de superación, esos que tanto gustan en Hollywood y que llenan de pañuelos las plateas, pero basándose en una historia real con muchas más aristas hubiera sido aconsejable un poquito más de riesgo. Como suele ocurrir en estos casos, cuando un actor debe interpretar un personaje con discapacidad está recibiendo nominaciones a todo tipo de premios (ya se que decir eso es políticamente incorrecto, pero es así), aunque hay que admitir que Eddie Redmayne como Stephen Hawking realiza una interpretación sorprendente y tan mimética que acaba desapareciendo el personaje y mostrando a la persona, aunque es la actriz Felicity Jones la que brilla como una estrella dándole la réplica desde la serenidad del sacrificio humano. Un film bonito, de bella factura técnica, guión clásico, banda sonora magnífica de Jóhann Jóhannsson (y omnipresente), fotografía de postal... o sea, teóricamente perfecta, tanto como un agujero negro.
